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Cómo evitar la frustración de fin de año y armar objetivos 2026 que SÍ cumplas
El plan a 3 años que te saca del ciclo de promesas rotas y te ayuda a construir el futuro que querés.
Hoy son 8 años de que lanzaba la campaña de crowdfunding de Soy Solo, mi primer best-seller. Si fuiste parte dejame un comentario en Instagram :-)
La Frustración de Diciembre
Diciembre. Fin de año. Una extraña mezcla de frustración y tristeza, resultado de pensar que nuestro futuro laboral no cambiará mucho el año que viene. Mirás para atrás y pensás en todas esas promesas que te hiciste en enero. "Este año SÍ iba a… (completá la frase)". Pero no pasó. Otra vez.
¿Te suena familiar? Es un sentimiento universal. Nos ponemos metas enormes para el corto plazo, no las cumplimos y nos damos con un látigo. Nos sentimos fracasados. Y esa sensación nos paraliza.
Pero el problema no sos vos. El problema es la forma en que te ponés objetivos.
Hay una verdad que me costó años entender, y es esta:
Somos mucho más potentes de lo que creemos a largo plazo, pero la frustración de no cumplir lo que creemos poder hacer (pero no) a corto plazo nos evita verlo.
Repetilo. Somos increíblemente capaces de cambiar nuestra vida en 3, 5 o 10 años. Pero somos malísimos para predecir lo que podemos hacer en 3, 5 o 10 meses. Y esa miopía nos condena a un ciclo de frustración anual.
El Último Flan de Osvaldo
Te cuento una historia. La de Osvaldo. Siete años en el mismo puesto. Todos los martes, en el comedor de la empresa, negociaba, con quien compartiera la mesa, su merluza a la romana por el flan con dulce de leche. La misma rutina, siempre.
Un martes, dijo: "Éste es mi último flan".
Lo iban a echar. Reemplazaban todo el call center por un bot. Osvaldo se aferraba a su empleo como si fuera un salvavidas y, al perderlo, de repente se dio cuenta de que ya no lo necesitaba, de que le hacía daño, de que no lo valoraban.
El problema es que se dio cuenta tarde. Cuando lo echaron, quiso comprarse el bajo que soñaba desde la adolescencia, pero sus dedos ya no respondían. Era tarde para ser una estrella de rock.
La historia de Osvaldo es la de miles. La de esperar a que el mundo decida por nosotros. La de no tener un plan. La de vivir en el corto plazo hasta que el largo plazo te pasa por encima.
La solución: dejar de pensar en 1 año y empezar a pensar en 3 (o más)
Para romper el ciclo de frustración, tenés que cambiar el horizonte. Olvidate de los objetivos a un año. Son una trampa. Empezá a pensar en un Plan Trianual.
¿Por qué 3 años? Porque es el plazo perfecto. Es lo suficientemente largo para lograr cambios profundos, pero lo suficientemente corto para no sentir que es una fantasía lejana. En 3 años, podés cambiar de carrera, aprender una habilidad que te duplique el sueldo, o empezar ese proyecto que siempre quisiste.
Mi método del Plan Trianual se basa en 3 preguntas simples pero poderosas:
1. ¿Qué espero del mundo para dentro de tres años?
El mundo no es estático. La IA, el trabajo remoto, la economía… todo cambia. No podés planear tu futuro en un mundo que ya no existe. Tenés que anticipar las tendencias.
No sigas la moda de la "cervecería artesanal" cuando todos ya la están abriendo; para ese momento, la decisión la tomaron dos años antes. Pensá qué viene después.
2. ¿Qué rol quiero tener en ese mundo?
Una vez que imaginás ese futuro, ¿dónde querés estar vos? No pienses en un puesto, pensá en un rol. ¿Querés ser el que resuelve un problema específico? ¿El que lidera un tipo de equipo? ¿El experto en una nueva tecnología? Sé específico.
3. ¿Qué tengo que hacer HOY para ocupar ese rol?
Acá es donde la magia sucede. El plan a largo plazo te da una claridad brutal sobre lo que tenés que hacer en el corto plazo. Ya no son "objetivos de año nuevo" aleatorios. Son pasos deliberados hacia un futuro que vos elegiste. Cada acción tiene un propósito.
El ejercicio de Stanford que te abre la cabeza: Los 3 futuros

Ok, ¿pero cómo imaginar ese futuro? A veces estamos tan metidos en la rutina que no podemos ver las opciones. Para eso, te recomiendo un ejercicio de la Universidad de Stanford llamado "Odyssey Plan" o el Plan de los 3 Futuros.
La idea es simple: diseñá tres versiones de tu vida para los próximos 3 a 5 años.
Futuro 1: Tu vida actual, mejorada
Seguís en tu camino actual, pero optimizado. ¿Qué pasaría si todo sale bien? Ascensos, aumentos, proyectos exitosos.

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